Aunque hoy venimos a hablar de un juego de Ubisoft, adelantamos que ni lo haremos de Assassin´s Creed y tampoco de Far Cry, dos de las sagas por excelencia de la compañía. Hoy le toca el turno a Tom Clancy’s Rainbow Six Siege, un videojuego que como otros grandes y por desgracia para algunos, nos deja de nuevo sin un modo historia y que lamentamos decir, y ojalá nos equivoquemos, que va a ser lo normal de aquí a un futuro de los shooter pensados para el modo online. Aunque la nos nos ha gustado esa ausencia del online, vamos a hablar por lo menos de los diferentes modos de juego y de todo el resto de puntos que debemos tocar para que os decantéis o no por la compra de este producto.

Caza al terrorista es una modalidad de juego que no necesita del online pero que tampoco es donde Ubisoft ha puesto todo el empeño pese a que la IA enemiga no es del todo mala, pero tapoco brillante.

En Tom Clancy’s Rainbow Six Siege (Rainbow Six Siege a partir de ahora) estamos ante un shooter pensado exclusivamente para jugar a modo multijugador y principalmente online.

El juego está planteado para enfrentarse en equipos cinco contra cincos, en donde un equipo lo formarán las fuerzas antiterroristas y por otro lado los propios terroristas.

Cada equipo cuenta con unas características que lo hacen mejor con respecto al otro, pero con algunas desventajas, por lo que no hay un mejor equipo que otro y sí un equipo al que cada jugador encajará mejor. Dentro de cada equipo hay diferentes soldados que como ocurre con cada equipo, cuentan ciertas habilidades.

La peculiaridad de cada misión o asalto viene con un pequeño plus irrelevante pero que hará que el jugador al menos se moleste en intentarlo, que consiste en unos objetivos secundarios dentro de la misión que, por nuestro propio bien para la adquisición de experiencias y extras, debemos hacer, aunque esto aumente considerablemente la dificultad de la misión.

Dependiendo del escenario y por tanto del objetivo que mejor encaje dentro del mismo, un equipo puede tener como estrategia principal la defensa o el ataque, por lo que no siempre que elijamos uno de los dos bandos vamos a estar esperando la infiltración del enemigo.

Nada más comenzar la ronda, quien defiende tiene la presión de organizarse bien para que cuando el equipo contrario venga, no tenga facilidades, al igual que quien debe ir a por el objetivo, o bien poner la bomba o bien rescatar a los rehenes, debe planear también la táctica de infiltración. Podríamos decir por tanto que cada ronda y partida puede ser única, no hay una variedad para que jamás nos encontremos una partida igual, a fin y al cabo serán similares, pero con variantes dependiendo de los jugadores. Y dicho esto, estamos obligados a deciros que Rainbow Six Siege es un juego que requiere de estrategia y de unión en equipo. No es un mata mata, ni debemos ir a lo loco. Podemos hacerlo, claro, pero para eso, no os recomendamos este título.

La experiencia sirve para ir desbloqueando armamento mejor y sobre todo y más importante, útil.

Como juego multijugador que es tenemos que tener en cuenta que el juego requiera de una comunicación fluida y constante, y eso no siempre va a ser posible. Jugar con amigos, o al menos conocidos, es vital, ya que si no es así, ¿cómo puedes comunicarte con una persona que ni hables ni sepas el idioma suyo?

Los más exigentes pedirán más modos de juego, pero lo que ofrece es lo que hay y nada más. Tras un tutorial que llega a entretener, las opciones jugables que hay en la modalidad online son protección de una zona, el rescate de rehenes y evitar que el enemigo plante la bomba. Obviamente, estas misiones están nombradas desde el punto de vista de uno de los dos equipos, por lo que en cada modalidad hay otra modalidad opuesta.

En lo técnico, Rainbow Six Siege gana en el sistema de destrucción de partículas que nos ofrece. Podríamos decir que prácticamente todo lo podemos echar abajo ya que todo se puede destrozas. Dependiendo del tipo de la superficie de pared, necesitaremos un método u otro, pero como poder, se puede entrar por cualquier parte de la habitación sin necesidad de entrar por la puerta. Una lástima para los “camperos”.

Como longitud de terreno, esta es reducida pero que se ajusta a la jugabilidad y a la mecánica, ya que no tendría mucho sentido escenarios de gran escala. Esto hace que desde casi el comienzo de la ronda estemos ya atentos y mirando cada píxel de la pantalla. Además de ello, hay variedad de mapas y más que está por venir.

Esto es, junto con la estabilidad de los fps, lo mejor del apartado visual, ya que como potencial deja mucho que desear para lo que podemos y debemos ir ya exigiendo y criticando cada vez con mayor intensidad.

En lo que respecta al apartado sonoro, Rainbow Six Siegue está más centrado en los efectos sonoros dentro del mismo juego y en los efectos especiales ya que es esto lo que premiará o no al jugador.

Fuente: GeneracionPixel